El duelo fue parejo, pero un gol sacado de la galera, desniveló el resultado, y dejó sin nada al rojiblanco.

Ezequiel García

Luego de un año y medio, la ciudad albergó nuevamente un clásico santafesino de fútbol, pero en este caso, fue en la Liga santafesina. En el «Súper Manuel Corral», cancha auxiliar de Unión, se enfrentaron dos equipos de irregular campaña, pero qué, sin embargo, el que ganase, y aprovechando algunos resultados ajenos, podía acomodarse en una plaza expectante, en la tabla de posiciones.

El encuentro arrancó con un entusiasmo e interés por buscar el arco rival, que ilusionaban de entrada y a ello le sumamos situaciones de gol, no podía ser mejor. La primera chance la tuvo el local, a los 4 minutos en los pies de Tablada, quien sacó un derechazo desde el mismo sector, que salió de pique al suelo y encontró la tapada de un firme Masuero. Hubo que esperar tan sólo 3 minutos para la respuesta Sabalera, Giandolffi tomó la pelota de primera, luego de un centro atrás de Aranda y su remate fue atrapado por González.

Hasta ahí teníamos unos primeros diez muy atractivos, sin embargo, cerca del primer cuarto de hora, el partido se paró unos instantes, para que atiendan al jugador Acosta. Quien sufrió un corte en el rostro, luego de un choque accidental con Arcando, el número 7 de Unión tuvo que ser reemplazado y desde ahí el Tatengue perdió un poco de vuelo ofensivo.

Parecía que el desconcierto rojiblanco contagió a los de Porpatto, lo cual desembocó en una merma a nivel juego y llegadas.

Colón intentaba por afuera, sobre todo por el sector izquierda a partir de las subidas de Glavocic, que armaba un interesante triángulo por aquel costado, junto a Zurbriggen y Aranda.

Desde la lesión de Acosta hasta pasada la primera media hora, Colón, de a poquito, fue superando a su rival, tal es así que entre los 25 y los 30, tuvo dos situaciones muy claras para desnivelar. La primera llegó tras una desatención defensiva de Unión, qué a raíz de un pelotazo largo, dejó cara a cara con el «1» a Troncoso, quien remató con la punta del botín y el balón pasó muy cerca del arco Tatengue. La segunda se produjo en los pies de uno de los puntos altos que tuvo el partido, Glavocic, quien primero corta el ataque rojiblanco en ¾ de cancha, luego se lleva la pelota de arremetida y habilita de gran forma al «10»; este tira un centro al medio y tras un flojo despeje, el balón le queda a Glavocic, que remata y hace lucir una vez más a González.

A Unión le costaba mucho generar juego en el medio; por los costados los laterales no lograban asociarse ni desbordar, Del Blanco y Macies estaban inconexos, mientras que la energía y movilidad de Tablada, necesitaba de sus compañeros para traducirse en opciones de gol. El elenco de Mosset, se aferraba a la pelota quieta y a los disparos de larga distancia, uno de los encargados de utilizar esa última vía fue Macies quien se animó desde lejos y su zapatazo pasó a un metro del ángulo derecho. Colón proponía un juego más profundo y fluído, no obstante, los de la avenida empezaban a tener situaciones. A los 38 de juego, Del Blanco recuperó la pelota en mitad de cancha y cambió el ritmo para así, tras combinación con Seguro, meterse en el área y definir al primer palo, encontrando la respuesta de Masuero.

El Tatengue necesitaba más de su enganche. Inmediatamente después de esta última oportunidad, llegó un córner desde la izquierda que derivó en el frentazo de Martínez y el balón se fue por arriba del travesaño.

Durante los últimos 5 de la primera mitad hubo lugar para mucho más y Unión con más empuje que fútbol terminó emparejando un desarrollo que en lo global, dejo a un Colón levemente superior, aunque el empate estaba bien y si era con goles también.

Segundo tiempo

La presión de Unión, la solidez de Colón y un gol con responsabilidades compartidas.

En el inicio del complemento se vio a un local dispuesto a arrinconar a un Colón que esperaba e intentaba de contragolpe. A los 5, nuevamente la pelota parada fue el “As” bajo la manga de Unión, es que del Blanco ejecutó un córner desde la derecha que picó dentro del área y nuevamente Martínez fue quien ganó. En este caso parando la pelota y ensayando una media chilena que tenía buen destino, aunque se interpuso un defensor desviando la bola.

El partido había caído en un bache, sin llegadas, con un Colón algo pasivo en relación al gran primer tiempo que había hecho y ahora sí, un Unión más protagonista, pero escaso de ideas.

Con este panorama, a los 14 minutos, el partido tuvo su punto de inflexión en el resultado: un pelotazo largo de Arcando, derivó en una pelota que quedó libre sin dominio y Zurbriggen, desde casi 30 metros y con una gran repentización sacó un derechazo furioso, que se le coló por arriba al guardameta rojiblanco – al cual se le podría reprochar haber estado demasiado adelantado –  aunque de todas formas, el mayor mérito fue el del delantero Sabalero, quien conocía esta arriesgada forma de jugar de González y aprovechó para abrir el marcador.

Con la desventaja, Unión se apuraba en buscar el empate, mientras que Colón se cerraba bien atrás y generaba posibilidades de contragolpe. Mosset movía el banco, buscaba variantes, pero a Unión le costaba hilvanar jugadas claras, desde el ultimo ¼ de hora, el central izquierdo se paró como delantero y Unión se repetía en envíos largos y cruzados que, aprovechando la altura de su número «6», complicaban al fondo rojinegro, aunque no lo suficiente.

Por su parte, Colón resignó el ataque, asumía riesgos, aunque parecía cómodo defendiéndose de esa forma. Los últimos 5 minutos solo dieron lugar a un remate de afuera, por parte de Peresutti y alguna que otra arremetida de Bedouret.

El árbitro pitó el final y Colón se llevó los 3 puntos, justificados desde un juego de buen trato de pelota en el medio, sobretodo en el primer tiempo, lo que le dio mucho poderío ofensivo combinado con una solidez defensiva para aguantar la arremetida Tatengue.

Unión tomó el protagonismo durante la mayor parte del segundo tiempo, pero no tuvo ideas claras para aprovechar la tenencia. Los pibes de Colón, varios de ellos protagonistas en la derrota con River por la reserva de AFA, hicieron frente al clásico y a las críticas durante la semana, ganando un partido que lo posiciona mucho mejor que en la previa, mientras que Unión, necesita la regularidad que lo meta definitivamente en el pelotón de arriba.